Las corporaciones deben asumir un rol social dentro de las comunidades en las que desarrollan sus operaciones y deben mantener un enfoque empresarial que promueva el respeto de los deberes y derechos de los miembros de la sociedad. Ante este compromiso social de las empresas por administrar los derechos ciudadanos de las personas se deben tener en cuenta los derechos sociales, civiles y políticos de éstos. Por ello, a continuación se plantean cuatro recomendaciones que permitirían lograr la ciudadanía corporativa en el caso Madoff.
En primer lugar, Madoff debió crear mecanismos internos que proporcionen seguridad social a sus trabajadores mediante la implementación de planes de salud, capacitación, financiamiento escolar, entre otros beneficios que fortalezcan la relación entre la empresa y el empleado, y que permitan el reforzamiento de una cultura organizacional basada en valores compartidos por todo el personal. Del mismo modo, Madoff tenía la obligación de desarrollar planes de protección financiera hacia sus clientes que protejan sus inversiones y que permitan la implementación de un sistema de compensaciones acorde con el riesgo de cada portafolio de inversiones.
En segundo lugar, Madoff debió orientar su accionar estratégico hacia la protección de los derechos civiles de sus clientes y grupos de interés en general mediante la formulación de una política empresarial que vele por los intereses de la comunidad. De esta manera, hubiera sido conveniente que Madoff desarrolle una perspectiva equivalente en cuanto al desarrollo de su ciudadanía corporativa, ya que mantener una orientación empresarial enfocada hacia el desarrollo social incrementa la capacidad de una organización para atender los problemas de la comunidad en la cual se desarrolla.
En tercer lugar, la participación de Madoff en su comunidad no sólo debió circunscribirse a un papel social, sino que también requería de una participación política de la empresa en temas que atañen al interés público y organizacional. De esta manera, la empresa debe promover la identidad, compromiso e integración social que permita la sostenibilidad de la sociedad a largo plazo. Madoff tenía la capacidad de influir dentro del campo económico de la sociedad y así buscar mejoras en la administración financiera que permita cambios favorables para la comunidad.
Por último, para que Madoff haya podido desarrollar una ciudadanía corporativa eficiente debió mantener un equilibrio organizacional que le permita integrar sus planes empresariales según consideraciones ambientales, económicas y sociales que contribuyan con el bienestar de la comunidad en general a largo plazo. De esta manera, y citando a Maquiavelo, “(…) una empresa exitosa debe ser próspera, pacífica y estable”. Esto permitirá la sostenibilidad que permita la satisfacción de las necesidades de la sociedad en el presente, sin poner en riesgo la satisfacción de las futuras generaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario